El año 2002, el directorio de la Fundación Balmaceda decidió otorgar este premio al ex presidente de la República Don Patricio Aylwin Azocar.
Su elección se fundamenta en reconocer su importante labor como dirigente político en las últimas tres décadas, periodo en que jugó un papel decisivo por defender la libertad, el respeto de los Derechos Humanos y la recuperación de la democracia, para luego convertirse en presidente de la República tras 17 años de dictadura militar.
En los años que el país recuperó la democracia la figura de Aylwin se destacó por alcanzar notables éxitos en los sectores económico, financiero e internacional donde reposicionó a Chile en su prestigio perdido.
Como mandatario, su tarea en la lucha contra la pobreza y en plano de los derechos humanos sobresale, estableciendo que la reconciliación es el eje de la redemocratización del país.
Aylwin en su constante deseo de búsqueda de justicia y para sancionar la violación de los derechos humanos y otorgar reparaciones a los familiares de la víctimas, crea la Comisión Nacional de Verdad y Reconciliación, cuyo informe constituye un balance de la represión ejercida por parte de agentes del Estado durante el gobierno del General Augusto Pinochet.
La Corporación de Reparación y Reconciliación y la Oficina Nacional de Retorno, son organismos creados por Aylwin en su afán de acercarse a la justicia y reconciliar al país, con estas acciones el ex presidente muestra una clara visión y compromiso con la libertad al enfrentar el tema de los Derechos Humanos y de esta manera redemocratizar al país sin perjudicar el desarrollo y progreso económico.